El 33% de las personas que poseen el carnet de conducir sienten miedo al volante que puede ser causado por diversas razones tanto psicológicas como físicas.
La amaxofobia o lo que es lo mismo el miedo a conducir es una patología que sufre alrededor de una tercera parte de las personas con carné de conducir, que a pesar de haber completado su aprendizaje con éxito son incapaces de ponerse al volante de un vehículo porque la sensación de temor a ponerse en peligro les bloquea por completo. Según estudios, el número de mujeres que sufre amaxofobia duplica al de los hombres.
El motivo principal por el que una persona sufre fobia a la conducción está relacionado sobre todo con una baja autoestima o con la falta de confianza de su entorno más inmediato. Especialmente de los padres o de un marido dominante en el caso de las mujeres. También influye en este problema haber sufrido un accidente, aunque en menor medida.
Muchas de las personas que han obtenido su carné de conducir sin ningún tipo de problemas no son capaces de tomar los mandos de su vehículo, sobre todo porque ya no cuentan con la presencia de un profesor que evite las situaciones más complicadas o porque no son capaces de adaptarse al cambio de auto.
En este caso, la mejor manera de superar el miedo es enfrentarse directamente a él: en la medida de lo posible se debe coger el auto sin compañía e ir aumentando la complejidad poco a poco. Se debe comenzar por vías con poco tráfico, después intentarlo por el interior de la ciudad por zonas con cada vez más tráfico e incluso cuando pase el tiempo atreverse en solitario a incorporarse a una autovía.
Si la amaxofobia es tan grave que la persona afectada no puede superarla por sí misma no debe dudar en acudir a la ayuda de un profesional. El psicólogo se centrará sobre todo en conocer las causas que provocan los temores, para recomendar al paciente el tratamiento más adecuado.