La buena visión de los niños afecta no sólo a su desarrollo sino también a su capacidad intelectual. Y es que no ver bien afecta al rendimiento escolar de los niños. La vista es el sentido por el que se recibe la mayor cantidad de información, aproximadamente el 90 por ciento. Según un estudio realizado por la Fundación del Instituto de Ciencias Visuales de Madrid (INCIVI), entre el 15 y el 30 por ciento del fracaso escolar puede deberse a problemas de visión.
La mala caligrafía, las faltas de ortografía o la dificultad para leer son, a veces, consecuencia de problemas de enfoque o de percepción, muy difíciles de detectar sin ayuda médica. En la mayoría de las ocasiones, los niños no se quejan, pero hay algunas actitudes que pueden hacer sospechar a los adultos que existe algún problema.
Alimentos recomendados para la vista de los niños
La alimentación juega un papel muy importante en la prevención de la salud ocular. ¿Cuáles son los alimentos que curan a los niños la visión y los ojos, y cómo elaborarlos para aprovechar al máximo sus propiedades y gusten a los niños?
La doctora María Concepción Vidales Aznar, especialista en Nutrición, Dietética Humana y Trastornos del comportamiento alimentario, directora de la clínica Nutrimedic, y autora del libro Cocina que cura, asegura que una dieta rica en vitaminas y minerales, y ácidos grasos esenciales es fundamental para mantener la visión de los niños en buen estado.
Los mejores alimentos para mantener una buena salud ocular son las frutas y verduras de color rojo y anaranjado. Esto es debido a su contenido en vitamina A y provitamina A (betacaroteno), los dos con propiedades preventivas y beneficiosas para la visión. También contienen importantes cantidades de vitamina C con efectos antioxidantes.
Asimismo, las frutas y verduras en general son ricas en vitaminas del grupo B, que son necesarias para el buen funcionamiento del sistema nervioso y la transmisión de información al cerebro. Otras sustancias necesarias para la buena salud ocular son la luteína y zeaxantina, dos pigmentos que también podemos encontrar en muchas frutas y verduras de color naranja y verde.
Para cuidar de la salud visual de los niños, se ha establecido que el 60 por ciento de la ingesta de vitamina A debe provenir de la dieta, es decir, debemos ingerir los carotenoides de los alimentos. También puede recomendarse el consumo de 2,1 mg diarios de betacaroteno en forma de suplementos.
Consejos de preparaciones para los niños
La mejor manera de aprovechar la vitamina A es tomar frutas, verduras y hortalizas de color rojo aranajado como melocotón, zanahoria, naranja, pomelo, tomate y mango. Conviene consumirlas en crudo como frutas frescas, pero los niños también las toman muy bien en zumos y son muy recomendables.
En papillas y purés, la zanahoria y la calabaza, mezcladas con patata, calabacín y puerro, también resultan deliciosas para el paladar de los niños por su sabor dulzón.
Fuente: www.guiainfantil.com