Si piensas que por pedir una ensalada en un restaurante de comida rápida evita las grasas saturadas y sal contenidas en las hamburguesas y patatas, ¡piénselo dos veces!
Una investigación científica llevada a cabo por la organización Confederación Española de Organizaciones de Amas de Casa, Consumidores y Usuarios (CEACCU ) ha confirmado lo que mucha gente ya sospechaba: las ensaladas en los restaurantes de comida rápida son tan negativas para la salud como las propias hamburguesas servidas en este tipo de establecimientos.
El estudio ha revelado que estas ensaladas, supuestamente sanas, presentan un considerable contenido en sal y grasas saturadas. De hecho, muchas de estas ensaladas por sí solas contienen alrededor de la mitad del total de la ingesta de sal diaria recomendada por la Organización Mundial de la Salud (OMS) para una persona sana, (5 gramos).
Esto significa que cuando ingerimos una hamburguesa y una ensalada en un restaurante de comida rápida estaremos, con toda seguridad, superando la dosis de sal que nuestro organismo podría ingerir sin sufrir daños, favoreciendo el aumento de colesterol y el riesgo a desarrollar hipertensión o problemas cardiovasculares.
El estudio ha sido posible tras analizar el contenido en sal y grasas de los alimentos ofrecidos en diferentes establecimientos de comida rápida, los cuales publican información nutricional sobre sus productos en menús y páginas webs propias.
Las conclusiones del estudio también han dejado de manifiesto que el problema no radica sólo en los ingredientes de las ensaladas sino también en los diferentes aliños utilizados para su acompañamiento y cuyo contenido nutricional no queda del todo claro.
En definitiva, no se deje engañar por la creencia popular de que cualquier ensalada es saludable y beneficiosa para nuestro organismo y asegúrese de consumir productos frescos.
Fuente: www.nosotras.com