Muchas personas deciden dejar de lado los productos lácteos por problemas de salud, intolerancia a la lactosa o simplemente por una cuestión ética. Es cierto que se torna complicado, pero también existen una cantidad de maneras para sustituir la leche.
Los productos lácteos se vuelven bastante complicados de reemplazar en algunas ocasiones. No todas las personas pueden consumirlos habitualmente (problemas de intolerancia a la lactosa, colesterol alto, alimentación vegana, etc.), pero por suerte existen varias formas de «buscarle la vuelta». Al fin y al cabo, sustituir la leche es algo posible.
Estas son algunas maneras de sustituir la leche:
Las leches vegetales: Existen una gran cantidad de leches vegetales que aportan muy buenos nutrientes de toda clase, con las propiedades que cada componente les brinda. Algunos ejemplos pueden ser la leche de almendras, de avena, de soya o de coco. Lo más interesante es que muchas de ellas pueden prepararse en el hogar.
Tofu: Para reemplazar productos lácteos como el queso, nada mejor que el tofu. Aporta calcio, proteínas y viene en diferentes consistencias, ideal como para preparar lo que se te ocurra. Además, es bastante económico. Para gratinar comidas o para usar en reemplazo de queso rallado, la levadura en copos va de maravillas. Si quieres un rico untable no lácteo, prueba este queso de girasol.
Productos no lácteos ricos en calcio: Muchas veces uno de los mayores temores de los que dejan de consumir leche es el tema del calcio que los productos lácteos aportan. Existen varias maneras de gozar de los beneficios de este mineral en los vegetales. Las semillas de sésamo, acaso, sean de lo mejor en este sentido.
Y tu… ¿Qué otros elementos utilizas para suplantar los lácteos? ¿Qué preparaciones realizas para hacer todo lo posible para que la ausencia de leche no se note en tu dieta?
Fuente: www.innatia.com