La Igualdad Parental promete poner fin a discriminaciones

La Igualdad Parental promete poner fin a discriminacionesLa separación de los padres es una de las cosas más dolorosas para los niños. Vivir disputas en tribunales y estar yendo de una casa para otra, es muchas veces una experiencia traumática, sobre todo si se considera que muchos progenitores ponen como “moneda de cambio” a los hijos que son quienes más sufren.

Ahora, si los padres desean vivir separados, será por mutuo acuerdo que se definirá el cuidado personal de los hijos. De no existir ese acuerdo, estará en manos del juez la determinación y ambos igualmente tendrá la garantía de fijar un contacto periódico y estable con su hijo o hija, en el cual pueda participar en el cuidado personal y buena crianza.

El proyecto impulsado por la agrupación Amor de Papá fue puesto en el congreso en 2008 y durmió hasta hoy, que fue aprobado. Para su creador, David Abuhadba esto representa el fin a años de discriminación hacia los padres. «La Ley Amor de Papá instaura la igualdad parental sobre la base del principio de la corresponsabilidad de ambos padres. Es decir, igualdad de derechos y obligaciones para papá y mamá en el cuidado de los hijos en el caso de que los progenitores se separen«, explica.

La idea de este proyecto es favorecer el acuerdo entre los padres al ponerlos en igualdad de condiciones para conseguir lo mejor para los hijos y terminar con el 85 por ciento de las mediaciones obligatorias frustradas evitando que los hijos lleguen a los tribunales.

La principal incertidumbre, está en que las juezas hagan caso a la nueva ley y no se dejen llevar por el principio antiguo. “Ese es el gran drama. Nosotros obviamente no hemos querido hincar el diente en eso, porque hemos estado celebrando este avance, y queremos ver primero con cautela y prudencia cómo se comporta en la práctica el tema”, cuenta Abuhadba.

Ahora, explica que en el caso de que ambos padre cumplan criterio y los requisitos para quedarse con el niño, y los dos tengan el deseo de hacerlo sin lograr el acuerdo, “tienen que intentar de llegar a acuerdo en la mediación obligatoria, de no resultar ir al tribunal, y si en el tribunal tampoco son capaces de llegar a acuerdo, la jueza va a tener que decidir por el bien superior del niño”.

Fuente: vidayestilo.terra