Una clienta de mis servicios de organización tenía uno de los cuartos más desordenados que he visto: una gruesa capa de polvo cubría todo y decenas de peluches y adornitos plagaban cada centrímetro disponible. Comenzamos por ordenar su closet y luego por distintas razones, no seguimos trabajando. Me comentó luego que el closet seguía ordenado y era el único oasis que tenía en campo de batalla que continuaba siendo su habitación. Se para aún a observarlo y disfrutar de los ganchos todos iguales, de la ropa dividida por categoría y color. Y su impuntualidad crónica ha sufrido cierta mejoría, ya que el tiempo que antes le tomaba vestirse solía ser una de las razonas para llegar tarde.
¿Se pueden ordenar demasiado un closet? Puede ser. Sin embargo cualquier cosa es mejor que tener el closet como lo tenía mi clienta. Sacamos casi una decena de bolsas medianas de ropa manchada e inutilizable. El piso estaba lleno de zapatos y otros artículos, por lo cual era frecuente no poder conseguir una de las partes de un par que buscaba.
Haz lo siguiente:
1. Organiza tus ganchos
Entre los ganchos que se estaban usando habían decenas que no se usaban, al punto que era imposible meter o sacar nada con facilidad. Visualmente era desagradable. Decenas de tipos distintos de ganchos, todos metidos en direcciones distintas. Primero que todo sacamos todo de los ganchos y los sustituimos por unos del mismo color y material todos. Esto crea una uniformidad que primero es agradable y segundo es utilitaria, ya que hace que uno se pueda enfocar visualmente en la ropa, no en lo ganchos.
Establecimos unas reglas y hábitos: tódo gancho sin ropa, se cuelga en el extremo derecho o izquierdo del closet, junto con todos los otros ganchos inutilizados. En realidad la diferencia entre devolver un gancho al mismo sitio de donde salió y ponerlo al extremo es nula. Pero los resultados son grandes: el closet se ve ordenado y es mucho más fácil conseguir un gancho donde colgar algo que se uso por unas horas o agarrar todos los ganchos libres a la hora de planchar.
2. Organiza la ropa en ganchos por categoría y luego por color:
En el closet de mi clienta la ropa estaban mezclados los pantalones con las camisas, las faldas y las chaquetas. Aparte de verse desordenado ese sistema causa que nos olvidemos de qué tenemos. Por ejemplo: si tenemos 10 jeans mezclados con otras cosas es posible que no lo sepamos y vayamos a comprar el número once, sin necesitarlo y cuando necesitamos otras piezas mucho más. También cuando tenemos todo junto es más fácil recordar que tenemos esa falda de color beige que va tan bien con los zapatos nuevos color aqua.
3. Pon la ropa que ya usaste al revés: Este es un tip que aprendí de mi mamá. La manera más segura de desgastar tu ropa es usandola sólo por unas horas y lavandola entre cada uso leve. Por supuesto no recomiendo hacer esto con ropa realmente sucia o sudada, per si usaste una camisa para salir un momento a comprar el periódico te recomiendo que la cuelgues al revés de manera que la próxima vez que te vistas veas que no es ropa recién lavada, pero que puedes usar de todas maneras.
4. Respeta tus zapatos
Mi abuela después de cierta edad no era una mujer delgada. Cuentan que no gastaba mucho en ropa sino en carteras y zapatos. Decía que la ropa nunca le quedaba bien, pero los zapatos y las carteras eran un confiable proveedor de elegancia. Creo que es genético: tengo zapatos para usar uno distinto por dos semanas.
Tras experimentar mucho llegué a la conclusión de que la mejor manera de poner los zapatos, y también la más económica y la que más cuida de los mismos es mantenerlos en sus cajas con una foto pegada afuera. Hoy en día muchas cajas traen una ilustración y la foto no es necesaria.
La cosa más irrespetuosa que se puede hacer con unos zapatos es tenerlos tirados en el fondo del closet, uno encima del otro, a merced del polvo. Así los tenía mi clienta. Pusimos cada uno en cajas transparentes y aprovechamos para anotar qué zapatos realmente requería. Nos dimos cuenta de que tenía 5 pares de zapatos semi formales marrones, pero ninguno azul, por ejemplo. Tomamos nota para que la próxima vez que fuera a comprar zapatos, que la prioridad era el color azul.
5. Devuelve lo que no es tuyo:
De los cientos de piezas que sacamos de ese closet tamaño mediano muchas resultaron ser piezas que eran de amigas y familiares. Las metimos en una bolsa grande y pusimos un límite de tiempo para devolverla toda. Una amiga que nos ayudaba, se sintió recompensada porque pudo recuperar muchas piezas que ni siquiera recordaba que no tenía en su poder.
6. Aprovecha para planificar tus compras:
Si botaste todas tus camisas blancas porque todas estaban manchadas y deterioradas, haz una corta nota de ello en una lista especial de compra. Con esto vas a utilizar bien el dinero cuando vayas a comprar, porque vas a estar seguro de que eso es lo que necesitas.
7. Evita las avalanchas de ropa.
Las siguientes son algunas razones para las avalanchas:
Primero ropa grande doblada sobre ropa pequeña, o al revés. Muchas veces doblamos la ropa a bultos de tamaños muy distintos y eso hace que las torrecitas de ropa sean poco estables. El doblado en sí es importante y para eso recomiendo tener o fabricar una tabla de doblado con un pedazo de cartón rígido. Esta hace que todas las camisas, por ejemplo tengan un área similar al se dobadas y por tanto se verán más ordenadas y crearán pilas de ropa estables.
Pilas altísimas de ropa. El segundo error es hacer unas pilas altas como un rascacielos. Por supuesto si quieres sacar una pieza de la mitad toda la torre puede derrumbarse, lo que hacer que tu ropa doblada sea un campo de batalla. Analiza tu closet y piensa si no puedes poner divisores dentro de los anaqueles que sostengan las pilas en su puesto. Piensa en pedazos de mdf, cartón piedra o incluso cajas de cartón.
Por último un error que causa desorden y falta de estética es no poner el doblez de cada pieza en la misma dirección. Para saber a qué me refiero fijate en la manera que ponen la ropa doblada en las tiendas. El doblez va hacia afuera, lo que hace que se vea más ordenado y se pueda sacar con facilidad.
Fuente: www.creaorden.com