La principal preocupación de una mujer cuando quiere preparase para ser madre, es saber qué es lo que tiene que hacer para que su futuro hijo se desarrolle en forma óptima y que el día que decida venir al mundo nazca fuerte y sano.
Te aconsejamos que una vez que decidas dejar tu método anticonceptivo te comportes como si ya estuvieras embarazada ya que los momentos más críticos del desarrollo de un bebé, ocurren durante las primeras semanas de vida del feto, tiempo que probablemente no estés enterada de la vida que viene en camino.
A continuación te daremos una lista de los cuidados a seguir antes de quedar embarazada para reducir al mínimo los posibles daños.
* Llevar una dieta saludable
Una dieta sana ayudará notablemente en el desarrollo de tu futuro bebé.
Antes de concebir es muy bueno preparar al cuerpo aportándole un balance apropiado de nutrientes, vitaminas y minerales. Esto se logra comiendo sano, lo que implica comer de todos los grupos alimenticios, o sea, frutas y verduras (que aportan vitaminas, potasio, fibra y hierro) leche, yogurt y queso (contienen proteínas, calcio y fósforo) carnes blancas, pescado, huevos y granos secos (otorgan proteínas) y pan, cereal, arroz y pasta (proporcionan carbohidratos) grasas, aceites y dulces (proveen energía), sin embargo estos últimos hay que consumirlos en poca cantidad.
Llevar una dieta balanceada y nutritiva además de dejarte en buenas condiciones te ayuda a cuidar el peso, antes de quedar embarazada deberías estar en tu peso ideal para evitar complicaciones asociadas al sobrepeso. Si tu peso es normal al final del embarazo deberías haber subido entre 11 y 15 kg, en cambio si te encuentras con sobrepeso este aumento no deberías exceder los 10 Kg en total.
Recuerda también tomar como mínimo 2 litros de agua para mantener una hidratación adecuada.
* Chequear que no existan enfermedades
Antes de concebir es importante también hacerse un chequeo general para determinar tu grado de inmunidad frente a ciertas enfermedades que pueden causar daños en el feto.
Para obtener esta información sólo basta hacerse un examen de sangre.
Alguna de las infecciones más comunes son:
• Rubéola: la rubéola en sí es una enfermedad benigna, pero cuando está asociada al embarazo puede llegar a ser temible ya que durante los tres primeros meses la madre puede trasmitirla al hijo. Si no eres inmune a la rubéola te aconsejamos vacunarte, sin embargo tienes que hacerlo antes de quedar embarazada y posponer la concepción durante al menos tres meses.
• Toxoplasmosis: esta leve infección provocada por parásitos, puede dañar gravemente al feto. Es recomendable que si no sabes si eres inmune a esta enfermedad no consumas carnes crudas o poco cocidas, ni tengas contacto con desechos de gato.
• Hepatitis B: Los hijos de madres infectadas que no son tratadas contra la hepatitis B, tienen aproximadamente un 50 por ciento de probabilidades de contraer el virus. Generalmente es posible prevenir la infección del bebé mediante la inmunización y el tratamiento inmediatamente después del nacimiento. La vacunación antes de quedar embarazada puede impedir que contraigas la infección.
• Varicela: al igual que la rubéola si no eres inmune a esta enfermedad debes ser vacunada antes de embarazarte y posponer la concepción durante tres meses.
* Dejar los vicios
Es importante tratar de evitar el cigarrillo, el alcohol y sobre todo las drogas.
Si tú fumas debes dejarlo cuanto antes porque además de que a ti tampoco te hace bien (cada día se comprueban más males asociados al cigarro) a un bebé no nacido podrías causarle daños irreparables. Las más serias complicaciones se deben a que la nicotina y el monóxido de carbono (sustancias presentes en los cigarros) “cortan” el ingreso de oxígeno de tu bebé y esto puede causar bajo peso al nacer, nacimiento prematuro, bajo desarrollo de su cuerpo además de problemas de aprendizaje y conducta.
Es posible que dejar de fumar te tome un tiempo, pero hazte el ánimo que se puede y le estarás haciendo un gran favor a la personita que luego vendrá en camino.
Fuente: miembarazo.cl