20 excusas para romper una dieta. Parte IV

13. Obstáculo: Me siento frustrado si pierdo medio kilo o uno después de esforzarme toda la semana.

Muchos ansían una poción secreta o una píldora mágica que quite instantáneamente el exceso de peso. Esos remedios no existen. Perder un kilo por semana es una meta más que realista. Además, así es más probable que el peso perdido no se recupere.

Estrategias:
• No centre toda su atención en la balanza. Concéntrese en comer mejor, hacer más ejercicio y mejorar su salud.
• No se considere «a dieta». Trate de pensar que busca un estilo de vida más saludable.
• Anote en una lista los beneficios de perder peso y léala cuando sienta que su motivación flaquea.
• No use los altibajos de la vida como excusa.
• Recuerde que entre medio kilo y un kilo por semana son ¡¡¡de 25 a 50 kilos en un año!!!

14. Obstáculo: No me gustan las frutas ni las verduras.

Para algunos, las frutas y los vegetales son desabridos y aburridos. No es verdad. Pueden ser muy sabrosos, sólo hay que saber cuáles comer y cómo prepararlos.

Estrategias:
• Recuerde que no tienen que gustarle todos los vegetales y frutas, sino sólo algunos.
• Elija frutas que nunca haya probado.
• Pruebe diferentes formas de preparación. Por ejemplo, ananás grillados.
• Si no le gustan los vegetales crudos, cocínelos. Aderécelos con hierbas.
• Agregue vegetales a una de sus sopas, añada ajíes y cebollas a la pizza, incluya fruta fresca en el cereal o el yogur.

15. Obstáculo: Tengo problemas para controlar la cantidad que como.

En una época de comidas enormes y tenedores libres, las porciones excesivas de comida y de bebidas se han convertido en norma. Además, los hábitos alimentarios aprendidos desde la infancia –que está bien repetir, dejar el plato limpio, que a la comida le sigue el postre– pueden resultar difíciles de superar. Pero difícil no es imposible.

Estrategias:
• Sirva las comidas en platos individuales. Eso le permitirá pensar dos veces antes de servirse una segunda porción.
• Use un plato más pequeño para hacer que menos comida parezca más.
• Coma lentamente, saboree cada bocado. Cuando come demasiado rápido, su cerebro no recibe la señal de que está saciado hasta que ha comido de más.
• Coma primero alimentos saludables y de bajas calorías.
• Al comer, concéntrese en la comida y en la compañía. Ver TV, leer o trabajar puede distraerlo y comerá más de lo previsto.
• Destine un área de la casa para comer y siéntese para todas las comidas.
• Si tiene hambre cuando ha terminado su plato, como algo de bajas calorías, como verduras frescas, fruta o yogur light.

16. Obstáculo : No puedo resistirme a ciertos alimentos, como chocolate y comidas rápidas.

Para alcanzar una meta, debe ser flexible. Al preparar su plan de alimentación sana, pregúntese cómo puede incluir algunos dulces o comida rápida sin arruinar por completo el objetivo. Cómalos de vez en cuando. Si no, corre más riesgo de darse atracones.

Estrategias:
• Que las tentaciones no lo tomen por sorpresa: planee con anticipación esos gustos y disfrútelos, moderadamente.
• Establezca de antemano la cantidad que comerá, y aténgase a ese plan.
• No tenga en su casa dulces o comidas que lo tienten. Si los quiere, tendrá que ir a comprarlos, y es posible que el deseo desaparezca en el camino. Si finalmente compra, adquiera una sola porción.

Fuente: Dietas.com